Tengo 10 años como astrólogo observando cómo todas las personas llegamos a un punto en nuestras vidas dónde el cambio es inevitable.

Y sí, digo “Llegamos” porque aunque yo pueda leer las estrellas y anticipar que viene el cambio, no puedo eludirlo. Cuando uno siente que su vida está muy tranquila y estable, llega Urano, llega un eclipse, llega una configuración astrológica y lo sacude todo.

Y Justamente eso es lo que estamos viviendo en este momento: EL FINAL DE TU VIDA CÓMO LA CONOCES, porque en este momento el destino te está pidiendo avanzar a una nueva etapa.

¿Lo estás sintiendo?

Es algo que yo he estado viendo todo el año en mi entorno:

Entonces, ¿Qué vas a hacer tú con ese grito fuerte de tu alma que te está pidiendo un cambio?

Y sí, lo sé, no siempre se siente cómodo. Ese grito del alma puede sentirse como:

Tristeza, vacío, duelo, desesperación, entusiasmo, motivación.

Sueños rotos, promesas rotas, grandes sueños. no sentirte amado o un gran deseo de sentirte verdaderamente amado y valorado.

Todas estas son señales inequívocas de la necesidad IMPERANTE de cambio.

Y aquí nos encontramos con el primer gran reto, y es que el miedo al cambio te congela, te paraliza.

Y claro, es difícil avanzar cuando estás cagado del miedo.

Y es que la posibilidad de cambio te obliga a enfrentarte con la incertidumbre de lo desconocido, porque:

Y es que el cambio es un viaje, que te pide:

Si te tomas un momento de silencio para responder a consciencia estás preguntas, entenderás por qué necesitas ese cambio ahora.

(Al final del blog te dejo la opción para descargarlas en PDF)

Y no quiero hacerte perder tiempo leyendo una vaina más larga que la biblia, así que vamos a la Chicha: Una Estrategia para Navegar el Cambio

El cambio no es sinónimo de perdida, es sinónimo de renacimiento.

Recuerdo hace años cuando me mude de mi país a vivir en Ecuador. Tuve que dejar mi vida, mi casa, mi familia, mis cosas atrás. Ese día subí al avión con un bolsito de mano con mi laptop, tarot, y libros de astrología; el gato en la otra mano y una mochila con 3 ropas.

Lejos de sentirse como una pérdida, fue el momento más feliz d mi vida, la oportunidad de iniciar una vida nueva en otro país, comida nueva por probar, y muchos destinos increíbles por visitar.

Es imposible renacer a una nueva vida cuando aún estás atormentado por los recuerdos de una vida vieja.

Así que en el umbral del cambio tienes que preguntarte que pesa más:

Hay una verdad que incomoda, pero libera:

Y por más luz, agua o atención que les ponga, no van a crecer un centímetro más hasta que los trasplante.

Esta es una verdad incómoda que nadie te quiere decir, así estás tú:
Tu vida ha crecido hasta donde lo permite tu entorno, tu identidad actual, y tus creencias.

Y si hoy estás pidiendo algo nuevo: un nuevo amor, un nuevo propósito, un nuevo inicio; no lo vas a recibir desde la misma energía, con las mismas personas, desde la misma vida que hoy te asfixia.

Quieres resultados nuevos, pero sigues rodeado de personas que te frenan, te minimizan o simplemente no te entienden.

Quieres empezar de nuevo…

Pero no has renunciado a la vieja versión de ti que se autosabotea con excusas, distracciones, diversión, dopamina barata (de la que no da satisfacción duradera).

Tú no eres un bonsái, aunque hayas aprendido a vivir como uno.

Eres un árbol que está listo para echar raíces profundas, expandirse y dar frutos, pero para eso necesitas un entorno fértil:

Entonces no te preguntes más
“¿por qué no cambia nada?”

Pregúntate mejor:

¿Estoy dispuesto a salir de esta maceta?

¿Estoy listo para perder lo que me limita, aunque me resulte cómodo?

Porque el portal está abierto, pero tú decides si atraviesas la puerta… o si sigues regando tu bonsái en la repisa de siempre, soñando con un bosque que nunca llega.

Cuando te encuentres en este espacio intermedio, incapaz de volver atrás (porque ya no existe), pero con miedo de avanzar sin saber a que tendrás que enfrentarte, Recuerda que no el pasado ni el limbo son tu hogar.

Estás en el punto medio entre el pasado que no volverá y el futuro que aún no has creado.

Aquí elige cuidadosamente tus pensamientos, tus acciones, tus emociones.

Obsérvate y deja de repetir comportamientos, hábitos, historias del pasado.

No es momento de precipitarse, es momento de asumir la responsabilidad que te corresponde mientras avanzas a la vida que estás por crear.

¿En quién quieres convertirte? Da un paso de confianza y avanza hacia lo desconocido.

El 98 % de las personas quieren transformar sus realidades de vida y crear cambios desde la superficie,

No se trata de hacer cambios en la apariencia de las cosas en tu vida, sino se trata de cambiar tu esencia, quien tú eres respecto a esa situación en tu vida, reinventar tu identidad en esa área y comenzar a actuar desde esa nueva identidad.

El ruido, el ir rápido, el querer correr, las opiniones de los demás; solo te hacen dudar y sabotean tu proceso.

Pero el silencio es el puente de contacto con tu alma y el poder de activación de tu brújula interna.

Y en un año y momento astral que grita RENOVACIÓN, REINVENCIÓN, Y TRANSFORMACIÓN por todos lados. No tengas dudas en dar ese paso a lo desconocido y vivir el cambio.